Colombia, Paz y la Tercera Vía: es hora que pensemos diferente
Cada colombiano merece una oportunidad de cambio, una representación comprometida que además de encargarse de superar los retos que plantea la comunidad, se ocupe de la compleja pero fructífera labor de apostarle al capital humano, un proceso de política activa con la comunidad que permite afianzar el mensaje de paz que el país ha buscado por décadas y que hoy en día se encuentra más cerca que nunca.
El sentido de vida del servidor público y más aún cuando es electo de manera democrática, es una labor representativa y propositiva, con el objetivo de analizar qué necesita la sociedad y resolver desde retos a gran escala, hasta situaciones de toda índole que afecten el modo de vida de cualquier ciudadano.
El proyecto parte de la idea de hacer que los colombianos pensemos diferente, una noción que podría parecer muy relativa pero que es justamente lo que el país necesita, un camino distinto para llegar a objetivos que se han pospuesto por décadas y que han llevado a múltiples comunidades a vivir situaciones difíciles ya sea en aspectos sociales, económicos o culturales.
Pero en este proyecto no estamos solos, como parte de la ola de cambio, el Presidente Juan Manuel Santos se encuentra trabajando en la misma dirección, aportando al capital social desde sus primeros días de gobierno, ha iniciado su segundo periodo presidencial destinando fondos para el mejoramiento de la educación en zonas con alto nivel de pobreza y presentando un compromiso encaminado a mejorar las condiciones de empleo para los jóvenes, elementos claves para el fortalecimiento del capital social.
Le apostamos a que en el país pensemos diferente, permitiendo una participación activa en política por parte de la comunidad, a través de una comprensión de todas las dimensiones de las problemáticas y necesidades que estos tienen. Poder traer bienestar, cultura y calidad de vida que son los elementos que permitirán al ciudadano sentirse representado de manera responsable.
Pensar diferente es reconocer los esfuerzos y mejoras alcanzadas en el pasado, aceptar que hemos ido mejorando como sociedad y que implementando las herramientas adecuadas, podremos sortear los retos que a diario afronta la nación.
El contacto con las poblaciones será directo, es una manera óptima de garantizar la representatividad de los individuos ante el Congreso y respetar el valor del voto ciudadano. Se buscará con persistencia garantizar calidad de vida a los colombianos, un camino que el Gobierno también tiene claro y viene avanzando con políticas importantes en materia de vivienda y salud, entre otras que ya se han ido adelantando y al que se sumará como un aporte importante la idea de pensar la política de forma diferente, con un proyecto serio y comprometido que hará reevaluar paradigmas presentes en la política nacional.
Hoy estamos ante un momento clave en la historia del país, hemos decidido tomar el camino de la paz y el progreso. Es el momento de darle valor al capital social y llevar a cabo una política responsable y transparente de la que el ciudadano sea veedor y beneficiario, vamos a cambiar a Colombia, ¡vamos a pensar diferente!
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[…] Cada colombiano merece una oportunidad de cambio, una representación comprometida que además de encargarse de superar los retos que plantea la comunidad, se ocupe de la compleja pero fructífera labor de apostarle al capital humano, un proceso de política activa con la comunidad que permite afianzar el mensaje de paz que el país ha buscado por décadas y que hoy en día se encuentra más cerca que nunca. El proyecto parte de la idea de hacer que los colombianos pensemos diferente, una noción que podría parecer muy relativa pero que es justamente lo que el país necesita, un camino distinto para llegar a objetivos que se han pospuesto por décadas y que han llevado a múltiples comunidades a vivir situaciones difíciles ya sea en aspectos sociales, económicos o culturales. El senador Andres Garcia Zuccardi le apuesta a que en el país pensemos diferente, permitiendo una participación activa en política por parte de la comunidad, a través de una comprensión de todas las dimensiones de las problemáticas y necesidades que estos tienen. Poder traer bienestar, cultura y calidad de vida que son los elementos que permitirán al ciudadano sentirse representado de manera responsable. Pensar diferente es reconocer los esfuerzos y mejoras alcanzadas en el pasado, aceptar que hemos ido mejorando como sociedad y que implementando las herramientas adecuadas, podremos sortear los retos que a diario afronta la nación. […]